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1.- Qué es el estrés y el miedo


A. EL ESTRÉS


El estrés es una sobrecarga que se produce en las personas cuando se ven envueltas por un exceso de situaciones que superan sus recursos.


Esta situación prolongada en el tiempo, produce un desequilibrio en el organismo a nivel físico, emocional o

mental que puede generar dolencias y trastornos.



CAUSAS. En la antigüedad, el mecanismo del estrés cumplía el propósito de preparar a los seres humanos para responder a estados de emergencia que le representaban una amenaza física. La respuesta consistía, por lo general, en huir o pelear, actitudes que requieren una gran cantidad de energía y fuerza muscular. Los cambios hormonales y otras alteraciones fisiológicas que se producen en estados de estrés van dirigidos a lograr la defensa instintiva del organismo. Si imagináramos a un hombre primitivo enfrentándose al ataque de un animal salvaje, veríamos que su organismo se prepara para responder a la amenaza. Su cerebro se colocaría en un estado de alerta máxima y sus sentidos se agudizarían.


En nuestra sociedad, el mecanismo del estrés se activa, no tanto a causa de peligros momentáneos, sino a causa de estados emocionales prolongados o que se repiten a diario. Bajo dichas circunstancias, la adrenalina, el cortisol y otras hormonas que son secretadas, pueden comenzar a causar daños a nuestro organismo: fatiga, falta de concentración, destrucción de los músculos, hipertensión, úlceras, impotencia, pérdida de deseo sexual, interrupción de la menstruación, aumento en la susceptibilidad a enfermedades, daños a las células nerviosas. Así como dolores de espalda por contracturas, migrañas, enfermedades psicosomáticas, como el colon irritable, anorexia, bulimia, depresiones, irritabilidad y un largo etc.



LOS ADULTOS - Tienen tres tipos de estrés:


Físico - Enfermedades, cansancio por falta de tiempo, mala alimentación, alergias, intolerancias, trabajo en condiciones insalubres, ruidos, etc.






Mental - Todas las preocupaciones y pensamientos repetitivos que no resuelven los problemas, que pueden desencadenar ansiedad, bloqueos y “Burn out”.





Emocional - Cambios en la familia, de país, muerte de un ser querido, cambios de trabajo, paro, problemas con los compañeros de trabajo, con la familia.



LOS NIÑOS. 


También sufren y se estresan por no cumplir con las expectativas de los adultos, o por dificultades de adaptación en el colegio, con los profesores, con las asignaturas, con sus compañeros, con los padres o con sus hermanos. ​






Para desbloquear el miedo que produce el estrés es importante conocer la causa y ver el hábito de compensación. Saber cómo actuamos ante estos factores estresantes y mediante técnicas de liberación de estrés ir desbloqueándolos.





B. EL MIEDO


El miedo es una emoción ligada, normalmente, a una reacción de defensa. Se desencadena de un modo inconsciente en situaciones de peligro -reales o imaginarios - o debido a pensamientos negativos que pueden ser actuales o del pasado pudiendo activar emociones muy difíciles de controlar.




Es un mecanismo de supervivencia que desencadena una reacción de ataque, huida o parálisis.


El miedo forma parte de nuestra existencia y nos acompaña a lo largo de nuestras vidas creando patrones de comportamiento que determinan nuestra personalidad.




Hay tres miedos troncales que se graban en la infancia de tal forma que improntan nuestra manera de actuar, estos son:


  • Miedo al abandono
  • Miedo a no ser valioso
  • Miedo a ser controlado.

Los hábitos que compensan esos miedos se transformarán, al hacerlos conscientes, en talentos.




CAUSAS EN LA INFANCIA, TODOS HEMOS SIDO NIÑOS.

Reflejos primitivos activos

Situaciones de cambios y de estrés

Separaciones o muerte de un ser querido
Se produce un sentido de inseguridad y falta de apoyo, así como el componente emocional de la pérdida, que si no se encuentra consuelo y ayuda puede durar mucho tiempo. Esta situación puede llegar a producir una tristeza profunda o depresión, si se reactiva el miedo a la pérdida o abandono.
Todos estos miedos suelen crear problemas de adaptación y falta de  concentración. No se puede aprender y trabajar óptimamente cuando se esta sufriendo o teniendo conflictos con los compañeros, con los padres o con los hermanos. Todos estos problemas se pueden traducir en miedos nocturnos, enuresis, falta de apetito, ansiedad por la comida, falta de  concentración, pesadillas, y problemas de conducta y comportamiento como agresividad, estados de ánimo depresivos, apatía y falta de participación.


Causas en adultos

Las mismas descritas anteriormente producidas en la infancia, acentuadas por el desconocimiento de la causa que nos produce el miedo.

Buscamos el problema fuera de nosotros, responsabilizando a los demás de lo que nos sucede, incluso pretendiendo que sea el otro el que nos resuelva los conflictos, de tal forma que no encontramos la solución al no ser capaces de cambiar el exterior, produciéndonos impotencia y cuadros de ansiedad. Queriendo cambiar lo de fuera nos desgastamos perdiendo energía y facultades. La pregunta y la respuesta está en nosotros: ¿Qué me está pasando a mí? ¿Qué estoy sintiendo? ¿Qué estoy pensando? ¿Cómo lo estoy gestionando? ¿Qué puedo hacer yo?.



C. MIEDO EN EL TRABAJO Y EN LAS EMPRESAS


Cuando las personas que trabajan o dirigen equipos en empresas, se ven inmersas en situaciones de miedo, nos encontramos con personas a las que se les anula el talento, la creatividad y la capacidad de innovación, y con un estrés que afecta a su calidad de vida y por tanto a la de su entorno, ya sea familiar y/o laboral. Mientras el cerebro está en modo supervivencia, no podremos realizar funciones como la reflexión, previsión e imaginación por ser estás cualidades del cerebro superior o neocortex.

Si la persona tiene incertidumbre por miedo a ser despedida, recortes de salario o tiene presión competitiva, se le pueden disparar las alertas del estrés de tal modo que se bloquean sus impulsos eléctricos entre las neuronas así como síntomas físicos, afectando a sus otros dos cerebros- intestino y corazón- con sus respectivas consecuencias.


2.- Soluciones


El miedo se puede resolver a través de su conocimiento, su consciencia. No se debe luchar con él, ni huir, tampoco ignorarlo. La intención es aprender de él, entenderlo, desbloquearlo e integrarlo de una manera constructiva. Es determinante descubrir su causa y su forma de expresión. Ver los hábitos creados para compensarlos. De esta manera, mediante técnicas de liberación de estrés, podremos superarlo.


"El miedo se resuelve cuando se traspasa
Paloma Cabadas


Para detectar la causa del miedo y del estrés y poder desbloquearlo, utilizo como herramienta la kinesiología, que es la ciencia que estudia el movimiento del cuerpo humano centrándose en la reacción de los músculos ante el estrés. El cuerpo humano es un ordenador perfecto, todo en él está interconectado. Cuando se somete a grados de estrés superiores a su capacidad y ante situaciones que no se resuelven, se desequilibra.


Mi labor como kinesióloga consiste en devolver el equilibrio, detectando la causa que provoca estrés o bloqueo. Su tratamiento aspira, principalmente, a aumentar el nivel de conciencia “darse cuenta” y energía, repercutiendo en el estado general de la persona, a nivel emocional, mental y físico. Mediante el Test Muscular Kinesiológico, es posible detectar las causas que producen estos bloqueos. Lo más importante es encontrar la causa de fondo que nos hace sufrir. Cuando se reconoce, se puede trabajar sobre el tema que lo origina y cuando se desbloquea, la persona puede descubrir sus talentos y encontrar nuevas soluciones a situaciones que no sabía resolver. Así como generar nuevas ideas que le capacitan para la resolución de conflictos, además de reactivar sus niveles energéticos repercutiendo positivamente en su organismo y en todas sus facultades.


También trabajo la liberación de ideas limitantes y emociones a través de las artes plásticas mediante caligrafías, que a la vez de aclarar ideas, pensamientos y sentimientos, nos ayudan a liberar emociones y hasta dolores y enfermedades psicosomáticas. Pintando dolores y emociones las sinapsis cerebrales se reactivan.

Trabajamos los tres sistemas: reptiliano, límbico y el neocortex a través de la libre expresión plástica.